Y/o el peligro de transitar por calles escarchadas por las mismas pérdidas de una red ya obsoleta, que sigue “reventando” las viejas cañerías y que -en algunos casos de reparación- obligan a “levantar” pavimento o cintas asfálticas que van dejando nuevos y enormes baches.

En principio, sin que la SCPL desmintiera o descartara el supuesto corte de servicio, el que al menos para hoy no está previsto, el mapa de enormes lagunas o de verdaderas riadas que buscan el desnivel natural sigue aumentando en la ciudad, sumándose a ello los desbordes cloacales que reiteradamente, como lo es en el barrio 9 de Julio, no sólo ensucia, sino que pone en riesgo la salud de las familias -con abuelos o niños en la mayoría de los casos- y hasta destruye muebles que el propio damnificado debe volver a reponer.

Las versiones de corte de servicio, que afortunadamente y en este caso no era verdad, provocó inquietud, aumentó la impotencia del contribuyente y, obviamente, resultó creíble en principio porque la situación es reiterada en el último tiempo y en una época en la que no era común sufrir la falta de agua.

La idea de una “realidad instalada” es que en el verano es cuando se provocan los cortes por baja de niveles en los lagos, por evaporación o por la falta de lluvias en la cuenca del Senguer; pero la “nueva realidad”, ya no deja margen para el supuesto período estacional del faltante. En el último tiempo, cualquier época o estación del año es “buena” para el corte del suministro.

A las causales anteriores, ahora debe sumarse el exceso de lluvia en la cuenca del Senguer, la turbiedad de las aguas o, lo que es peor aun, la rotura o puesta fuera de servicio de equipos de bombeo que, desde la zona Cerro Negro, comenzaron a sufrir el colapso por falta de mantenimiento por lo que -pese a que no se informa la gravedad de la situación- en los últimos días hubo dos bombas fuera de servicio de las tres existentes, lo que motivó un problema adicional a las otras causales, como lo es la falta de potencia para trasladar el agua por el ducto principal que tiene una traza con pronunciadas subidas, entre otros accidentes geográficos.

Como última novedad y mientras la situación de pérdidas, roturas y faltante de servicio continúa sin estar nada bien, el ministro de Infraestructura, Maximiliano López, anunció para hoy un nuevo encuentro con el ENOHSA a fin de conocer los avances de los trabajos en el acueducto para evitar el corte del servicio en el verano y, habría que agregar, “también en invierno”.