Con un cambio en el orden de circulación de quienes se dirigen desde el centro hacia el Camino de Circunvalación, se pasó en las últimas horas a una segunda etapa en la construcción de la rotonda para el cruce de las avenidas Alberto Cabrera y Pilmayquén.

El secretario municipal de Obras Públicas, Rubén Valerio, mencionó ayer que se avanza “de buena manera” según los plazos de contrato y manifestó su confianza en inaugurar el trabajo en marzo.

Valerio también se mostró “conforme” con el esquema de desvíos organizado para la ejecución de las tareas, que permitió una “buena logística” sin que se produjera hasta el momento ningún accidente.

La rotonda es considerada una obra clave para un cruce de numerosos conflictos viales.

Con un presupuesto, a septiembre del año pasado, de 8.369.000 pesos, la intervención presenta un desarrollo oval, de 48 metros para el eje mayor y 28,50 en el menor, y su calle principal se constituirá de hormigón armado, asentada sobre una base de tosca-cemento.

La intervención contempla además la pavimentación de los tramos adyacentes de Yrigoyen, Pirovano, Cisneros y Jamaiquino.

Otra, este año

Valerio confirmó ayer que el municipio avanza en el proyecto para licitar este año una rotonda en Pilmayquén y la avenida 14 de Julio, como parte del proyecto integral de readecaución de esta segunda arteria.

El funcionario reconoció que el objetivo integral de reconvertir a la avenida en una autovía --dos vías de circulación por mano-- es parte de una obra “muy costosa” para lo cual será necesario disponer de aportes provinciales o nacionales.

Por eso se tomó la decisión de construir esta primera de las tres rotondas que incluye el diseño total, desde el cementerio hasta el acceso a la autovía.

“Es un cruce de alta complejidad que dificulta mucho la fluidez y genera en las horas pico una cantidad de embotellamientos importantes. Estamos trabajando para disponer de la documentación que nos permita licitar la tarea”, señaló.

La intervención en la avenida 14 de Julio se comenzó a discutir en 2011 con los primeros trabajos topográficos e incluyó diversas reuniones entre funcionarios y vecinos del sector, buscando consensuar un proyecto que atienda las necesidades y usos de una calle cada vez más transitada.