Lo conduce un técnico de confianza de Cristina. En la mira también están dirigentes, artistas y periodistas.
A través de este equipo el Gobierno ordena el inicio de investigaciones tributarias, como una forma de hostigar y tratar de acallar a quienes no opinen como la Casa Rosada.
Clarín confirmó en tres fuentes de la AFIP que el equipo esta comandado por Guillermo Michel, el actual subdirector general de Coordinación Técnico Institucional del organismo recaudador Michel tiene dialogo directo con la Presidenta Cristina Fernandez de Kirchner y activa las investigaciones impositivas especiales solo cuando recibe una orden política de la Casa Rosada.
La relación con la Presidenta hizo que fuera el propio Michel el vocero de la AFIP ante la justicia por el escándalo de Ciccone.
El funcionario trabaja para las operaciones especiales, con un nucleo de funcionarios de su máxima confianza. No son mas de seis. Ellos mismos ordenan las acciones a las distintas reparticiones.
Michel tiene amplios poderes informales en la estructura de la AFIP y utiliza las delegaciones regionales del organismo para realizar la tarea que le ordenan.
Michel trabaja en forma coordinada con Ricardo Etchegaray y tiene solidos vínculos con funcionarios de la SIDE. Etchegaray lo nombró al frente de una Dirección de Investigación Financiera para que tenga acceso a información de movimiento de divisas, bonos, acciones y demás títulos de valores.
Pero su tarea principal es tener a cargo la instrumentación de las acciones de persecución tributaria, que ordena la Casa Rosada contra los que mantienen una actitud independiente frente al Gobierno.
Este fue el mecanismo que se utilizó para decidir iniciar en Rafaela los requerimientos tributarios al titular de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti y a su familia.
La apertura de la investigación se produjo después del enojo de la Presidenta porque el máximo tribunal declaro inconstitucional la reforma judicial También se utilizó una acción similar para iniciar inspecciones integrales a importantes empresarios y a dirigentes políticos.
Entre ellos se encuentra el jefe de la Unión Industrial de Cordoba, Ercole Felippa y hasta el empleado de la inmobiliaria de José Toselli, solo por opinar que el cepo paralizó la actividad inmobiliaria.
En la nómina existen otros importantes empresarios y banqueros que no denunciaron la anomalía, por temor a mayores represalias sobre sus negocios. Muchos estaban vinculados a los negocios con el poder, pero por algún motivo se distanciaron de la Presidenta. También se utilizan las inspecciones para hacer escarmentar a empresarios que se atreven a cuestionar la política económica de la Casa Rosada.
Además hubo acciones de acoso sobre periodistas no alineados a la Casa Rosada e intelectuales que se quejaron por algunos aspectos de la política oficial. Uno, conocido, fue el cineasta Eliseo Subiela Michel tiene amplios poderes dentro de la AFIP, y en los últimos tiempos avanzó sobre su estructura disponiendo ascensos, traslados y colocando hombres de su confianza en distintas direcciones y agencias del ente recaudador.
Michel también coordina operativos especiales de difusión como las denuncias contra los countries y en el último verano contra la AFA y los clubes de fútbol. La acción habría sido una represalia contra Julio Grondona porque reclamaba fondos impagos de Futbol Para Todos. Pero la denuncia fue desestimada por la Justicia. Ahora la AFIP inició un operativo de distracción con los pases de los jugadores.
El funcionario fue recomendado a la Presidenta por el gobernador de Entre Rios, Sergio Urribarri, una figura de estrecha confianza de Cristina. Urribarri aspira a ser el delfín de la Presidenta, si Cristina no logra postularse a una nueva reelección.
Antes de ser designado por l-a Presidenta en la AFIP, Michel trabajo en el estudio contable de Andres Ballotta-Pedro Kondratiuk. Bellota fue titular de la DGI y Kondratiuk principal asesor de Carlos Silvani, titular de la AFIP durante una parte del Gobierno de Carlos Menem. Michel es contador y tiene una especialización en Derecho tributario.
La utilización política de la AFIP como forma de presión política sobre dirigentes no adictos a la Casa Rosada, causa mucho malestar entre el personal de carrera y profesional del ente recaudador.
Los funcionarios consideran que las tareas especiales de Michel desprestigian a la AFIP y sus calificados funcionarios.
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