La implementación de la polémica medida tomada por el gobierno nacional con PAMI, por la cual le empezó a quitar los subsidios de la cobertura total de medicamentos a aquellos jubilados, para “una mejor administración del dinero”, comenzó a despertar las primeras quejas de los afiliados en San Luis,  que consideran como injusta su situación. Aseguran que los requisitos son muy “estrictos”, y que en varios casos son alcanzados por la medida a pesar de cobrar la pensión mínima. A pesar de los reclamos, en la delegación puntana de la obra social afirmaron que en general, la nueva medida fue “bien tomada por los jubilados”.

 

Aquellos afiliados de PAMI que perciban más de $8.500, o tengan una propiedad y un auto a su nombre, dejan de recibir el beneficio económico que les permitía una cobertura total del pago de sus medicamentos. Sin embargo, empezaron a surgir casos que no son tan así.

 

“La semana pasada fui a renovar la autorización de medicamentos, y me hicieron llenar una declaración jurada. Ellos ya tenían toda la información mía, y de alguna manera me obligaron a completarla con lo que ellos querían, porque me dijeron por ejemplo que les figuraba que era propietaria de una vivienda y de un auto”, develó Celia Becerra, una de las jubiladas afectadas, y explicó: “La casa es una vivienda social en un barrio, por la cual estoy pagando hace 30 años. El auto es un Clio, 50 % mío, y 50% de mi marido, que nos regaló mi hermana. No es de alta gama, ni mucho menos. Así que por eso, no me corresponde cobertura por ningún tipo de medicamentos. Yo tengo asma y varias patologías crónicas, y ya no me cubren más, porque para PAMI soy millonaria”.

 

Otra de las voces que se sumó a la vereda de las quejas, fue la de Natalia González, hija de jubilados, quien se mostró muy molesta por la situación que le toca vivir a sus padres. “Cuando mi papá fue a renovar la autorización, le dijeron que no iba a tener más remedios gratis, porque tiene otra obra social, algo que les cuesta muchísimo pagar y se vieron obligados a hacerlo hace muchos años por un problema de salud”, detalló y agregó: “Ellos dan una serie de condiciones, y mis papás tienen un auto que es de hace 20 años, una vivienda como bien de familia, y cobran la jubilación mínima. Es muy injusto lo que les está pasando”.

 

El marido de Celia, Gustavo Wolansky atraviesa una situación similar y manifestó su preocupación: “A mí me bajaron de 6 medicamentos que tenía 100% cubiertos a 4 nada más, a pesar de que son para enfermedades crónicas, pero eso a ellos no les importa. Cuando vaya a renovar la autorización, yo creo que me van a quitar el subsidio, a pesar de que cobro por debajo del límite. Tengo un auto modelo 2011, que creo que con mi mujer hemos hecho suficiente mérito para poder decir, por lo menos, que tengo un coche que no me va a dejar tirado. Y además nos regalaron la plata para poder pagarlo”.

 

La postura de PAMI parece ser distante de las críticas. “Cuando vienen los afiliados, se les explica cuál es el fin y el objetivo de esta medida, que es mejorar la administración de los recursos, para que lleguen a aquellos que más lo necesitan. Muchos lo aceptaron, aunque también hubo gente que no le gustó porque les tocó no tener el subsidio”, afirmó el director Héctor Urquiza.

 

Aseguran que la baja de los subsidios no es algo automático, sino que se aplica cuando los jubilados se acercan a PAMI con la intención de renovar las autorizaciones de medicamentos. “Muchas situaciones se plantean acá con el afiliado. El sistema muestra cuál es su condición, que es explicada por la persona. Si hay un afiliado que tiene una jubilación holgada, PAMI no le entrega el subsidio. A partir de ahí hacemos un estudio social y médico para ver si realmente le corresponde o no el beneficio”, aseguró Urquiza.

 

Ése es el punto que más molestó a los jubilados, porque le quitan el subsidio antes de hacer un análisis pormenorizado de su caso, según explicaron. Elisa Sosa, directora de Adultos Mayores de la Municipalidad de San Luis, expresó: “Los requisitos para poder acceder al subsidio no me parecen bien, creo que son demasiado rigurosos. Aunque sí me parece una buena idea que haya un control”.

 

Otra medida polémica

 

También ya se cumplió más de un mes de otra implementación de PAMI que trajo enojos en los pacientes oncológicos, que cuando quisieron retirar sus remedios como siempre, les dieron la noticia de que a partir de ahora debían realizar la autorización en las oficinas de PAMI, y ya no más en las mismas farmacias. Un paso más para los jubilados que se mostraron molestos con la medida.

 

Al respecto, Urquiza manifestó: “Las autorizaciones para la obtención de los remedios oncológicos antes se hacían en las farmacias, y ahora acá en las oficinas de PAMI. Puede que haya un poco de demora por la gran afluencia de público que ha habido, pero eso rápidamente se va a relajar porque las autorizaciones son por seis meses o un año, dependiendo de la situación del afiliado. PAMI está retomando el control de muchas situaciones que estaban delegadas”.