En medio de fuertes quejas de los tutores de establecimientos públicos en el inicio del ciclo lectivo 2014, desde algunos gremios analizaron la necesidad de salir en defensa de la escuela pública, al advertir un importante éxodo de alumnos al sistema privado.

En Corrientes, el ciclo lectivo dio inicio con un paro de 48 horas que fastidió a papás y mamás que envían a sus hijos a colegios públicos, pese a que sólo una parte de la esfera gremial se sumó a la medida de fuerza.

El análisis de la situación de la escuela pública surge de un estudio realizado por la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) que establece que al menos 300 alumnos migraron al sistema privado a raíz de un sistema deficiente en el ámbito público. Esto tiene que ver con medidas de fuerza, que en algunas partes del país, impactó en 17 días sin clases a menos de un mes del inicio.

“En Corrientes, pese al contexto nacional hemos tenido la posibilidad de iniciar un ciclo lectivo normal, pese a la crisis que existe en muchas provincias como en Buenos Aires. A nivel local existe un gremio que viene llevando a cabo este tipo de medidas el año pasado y ante pasado, pero no tuvieron un acatamiento total, lo que hace que nuestra provincia no sea tan conflictiva en ese sentido”, analizó ante época, Rufino Fernández, Secretario General de AMET en Corrientes.

Pero existe una realidad que también genera la disconformidad de los tutores a la hora de llevar a los chicos a establecimientos privados. Es la interrupción del dictado de clases por cuestiones de capacitación docente. Una herramienta necesaria para el educador a la hora de sumar puntos para obtener la titularidad, pero que se realizan en los días hábiles del cursado, sin la colocación de un maestro suplente.

Para Fernández, “habría que prever esta situación de manera que la realización de los cursos no entorpezcan el desarrollo del plan de estudios que hace a la organización institucional de los establecimientos”. Pero remarcó, “en Corrientes se ha logrado cumplir con los 190 días de clases el año pasado, e incluso se logró completar el calendario académico mediante el dictado de clases los sábados, que fue el caso de los colegios secundarios”. Y salió en defensa de la formación , al señalar que es un servicio que permite “un mejor servicio educativo”.

Detalló a su vez que esta migración, se produjo durante los últimos cinco años a nivel país y en ese sentido analizó también, que “los trabajadores de la educación podrían verse empujados a integrarse al empleo privado”.