El cierre del calendario de elecciones 2015 incrementó el perfil opositor que -al menos bajo el mapa político actual, con el kirchnerismo en la Casa Rosada- ostentan las capitales provinciales, con la sumatoria de tres nuevas jefaturas comunales del radicalismo, una de Cambiemos y otra del massista UNA.
Bajo este escenario, desde el 10 de diciembre habrá entonces nueve intendentes radicales (seis de ellos fueron reelectos).
Cinco de ellos deberán coexistir con gobernadores justicialistas, enuna relación de fuerzas que se hizo fuerte durante la década del noventa.
El centenario partido tuvo en cambio una baja, con el traspié en Resistencia.
Pero si la lupa se amplía, a ese lote de intendentes críticos deben sumarse dos intendentes macristas y dos peronistas disidentes.
En rigor, falta aún un capítulo clave para terminar de cerrar el círculo y desmalezar el diagrama de poder entre oficialistas y opositores: el balotaje del próximo 22 de noviembre, para definir la sucesión de Cristina de Kirchner entre Daniel Scioli (FpV) y Mauricio Macri (del frente Cambiemos).
Por de pronto, el paso por las urnas el pasado domingo marcó conquistas importantes para el centenario partido, asociado en frentes opositores, con las victorias en las ciudades de Paraná, Santa Rosa, Río Gallegos y San Salvador de Jujuy.
En Paraná, Sergio Varisco dejó sin reelección a la justicialista Blanca Osuna y convivirá con el justicialistaGustavo Bordet, mientras que en Santa Rosa Leandro Altolaguirre hará lo propio con el peronista crítico Carlos Verna.
En Río Gallegos, y por Ley de Lemas, la comuna quedó en manos de Roberto Giubetich, que jugará desde diciembre con la ministra de Desarrollo Social nacional, Alicia Kirchner en el Ejecutivo.
Por su parte, en San Salvador de Jujuy consiguió el pase por otros cuatro años Raúl "Chuly" Jorge, aunque tendrá en la Casa de Gobierno a su correligionario Gerardo Morales, que venció al peronista Eduardo Fellner.
En tanto, de manera lateral aparece Joaquín Losada, de extracción radical pero integrando el Frente Renovador para la Concordia, que sintoniza con la Casa Rosada y que a nivel provincia tendrá desde diciembre al actual vice, Hugo Passalacqua.
El lote de intendentes radicales se completa con los reelectos Ramón Mestre en Córdoba (tendrá en el Ejecutivo al peronista Juan Schiaretti, de UNA); José Corral en la ciudad de Santa Fe (con el socialista Miguel Lifschitz en la Gobernación) y José Luis Foulkes en Viedma (lidiará con el exfrentegrandista Alberto Weretilneck), lo mismo queHoracio Quiroga en Neuquén (convivirá con Omar Gutiérrez -MPN- en el máximo cargo provincial).
Integra además ese ramillete el radical Rodolfo Suárez en Mendoza (coexistirá durante cuatro años con el también ucerreísta Alfredo Cornejo en el Ejecutivo provincial).
En cambio, la UCR perdió el pasado 20 de septiembre el enclave de Resistencia, con el traspié del radicalLeandro Zdero ante el saliente gobernador de Chaco, Jorge Capitanich (PJ).
Pero si el arco crítico se amplía, a ese lote hay que sumar a los macristas Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad de Buenos Aires y Julio Garro en La Plata (fue electo el domingo junto con la espada de Cambiemos para la Gobernación, María Eugenia Vidal); al peronista disidente Germán Alfaro en San Miguel de Tucumán (Acuerdo por el Bicentenario) con el justicialista Juan Manzur en el Ejecutivo; y al renovador Gustavo Sáenz (con el reelecto justicialista Juan Manuel Urtubey en el poder).
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