Acuífero: el concejal Bravo dejó en claro que está "a disposición" del intendente Altolaguirre

Acuífero: el concejal Bravo dejó en claro que está

Hay concejales del FrePam que cuestionan el hipotético convenio con Aguas del Colorado

Cuelle, Giorgis y Villatoro mostraron dudas y se quejan de la falta de información. Mientras la Provincia mete presión, el intendente cuenta con otra visión dentro del propio FrePam.

El concejal radical Miguel Bravo dejó en claro que actuará en el Concejo, cuando tenga que tratar el traspaso del acuífero Anguil-Santa Rosa a Aguas del Colorado, tal como se lo pida el intendente Leandro Altolaguirre. “Él me va a indicar lo que es más favorable. Yo estoy a disposición del intendente”, aseveró.

De ese modo el edil dejó clara cuál será su actitud en el caso de que dentro del bloque oficialista se sigan generando cuestionamientos e incertidumbres respecto del convenio que la Provincia quiere firmar.

En los últimos días, tanto Félix Villatoro como Claudia Giorgis y Marcos Cuelle señalaron sus dudas sobre la propuesta de Aguas del Colorado. Eso demoró el respaldo formal al borrador del convenio. Mientras tanto el jefe comunal difunde la buena relación con la provincia y el gobernador Carlos Verna. El Ejecutivo pampeano ata a la decisión del traspaso el financiamiento de obras y acciones vinculadas con la emergencia sanitaria.

Bravo, con sus declaraciones, se alineó con el intendente para el caso de que las disidencias se exacerben. “Santa Rosa lo que tiene que solucionar es el problema del agua. Mi posición es entregarlo (al acuífero)”, dijo Bravo este miércoles en Radio Kermés 106.1.

Otros concejales del FrePam fueron mucho más cautos y tienen más dudas, tanto respecto de la duración del convenio como acerca del precio que se cobrará por el servicio. Esos datos la Provincia no los difunde, si es que los tiene claros.

Bravo admitió que, tal como dicen sus compañeros de banca, el acuífero podría seguir siendo manejado por la comuna, pero también advirtió que son necesarias “más inversiones en perforaciones”.

Remarcó la necesidad de fondos frescos, porque el municipio padece “una situación de quiebra y angustia”.

Insistió en que solucionar los problemas más acuciantes “sin financiación es complicado. Con recursos se podría mejorar, pero no hay. En cambio la Provincia sí tiene financiación y la posibilidad de hacer obras”, desde Aguas del Colorado.

Bravo reiteró en que “es el intendente el que debe resolver la situación y el problema. Yo tengo que confiar en mi intendente, al que acompañé. Su decisión es la mía”, repitió el concejal.

Tal como informó El Diario, los concejales del oficialismo municipal no dieron el martes acuerdo al convenio para el traspaso del acuífero Anguil-Santa Rosa. Claudia Giorgis, concejala del FrePam, confirmó que “no se ha arribado a un acuerdo definitivo”. Explicó que la decisión del bloque es esperar sin dictamen “hasta que estén dadas las condiciones”.

La situación del traspaso o no del acuífero está repleta de cortocircuitos, en el marco de un complejo proceso en el que las partes no terminan de ponerse de acuerdo. Se modifican incluso los borradores que van y vienen, pero hay aspectos centrales que los ediles quieren conocer y que Aguas del Colorado -según esa interpretación- retacea.

Hay además un enfrentamiento de fondo, que es político: el intendente Leandro Altolaguirre ya soportó severos cuestionamientos de funcionarios provinciales, pese a que insiste en que su relación con el gobernador Carlos Verna es “excelente”.

En su discurso del martes, el gobernador Verna hizo una nueva referencia a Santa Rosa: volvió a garantizar el apoyo y aseveró que no habrá aspectos secundarios que traben la relación.

Bravo dijo que ni escuchó el discurso. “No leí nada, tampoco me tomo tiempo para eso, sinceramente, con los problemas que hay en la ciudad”, dijo. “Vengo escuchando muchas cosas, pero lo que veo es que cada vez hay más empleados públicos”, se quejó de inmediato.

Acerca de la “pesada herencia” denunciada tanto por Verna como por el presidente Mauricio Macri, lo consideró “parte del folclore: el que viene ahora le echa la culpa al anterior. Puede ser que Macri tenga razón, pero hasta la gente está un poco cansada de escuchar esas cosas y quiere mirar hacia el futuro”.

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