El acueducto chino, en stand-by mientras se revisa el proyecto

El acueducto chino, en stand-by mientras se revisa el proyecto

El proyecto para construir un acueducto de riego en el norte provincial quedaría en suspenso durante seis mientras los gobiernos nacional y provincial estudian a fondo las cifras. Frigerio aseguró que la prórroga fue acordada con Bordet

La definición por el acuerdo con el gobierno chino para la toma de un préstamo de 430 millones de dólares destinados a la obra de un acueducto de riego en el norte provincial esperará unos meses. Precisamente seis. El gobierno provincial tenía que ratificar este 16 de julio el acuerdo que había gestionado el anterior mandato de Sergio Urribarri, pero el ministro del Interior Rogelio Frigerio informó este viernes que el gobernador Gustavo Bordet pedirá una prórroga de 180 días para adoptar esa definición. 

En ese lapso, no sólo se revisarían los números presupuestados para las obras, sino que se definirá que destino se dará al conjunto de los recursos. 

Hay que recordar que Bordet viene de reformar el proyecto original impulsado por Urribarri, que preveía la realización de dos acueductos de riego: La Paz-Estacas y Mandisoví Chico, para lo que se autoriza al gobierno provincial a tomar un préstamo 430 millones de dólares a tasas blandas. Bordet dejó en pie el segundo acueducto, que toma agua del lago de la represa de Salto Grande, y ahora se resolverá a qué obras se afectará el resto de esos fondos. 

Condiciones chinas 

El proyecto de riego del Mandisoví está presupuestado en unos 130 millones, a los que se deben sumar inversiones en caminos, redes de fibra óptica y agua potable que elevan la cifra a unos 180 millones. Esta es la parte del acuerdo de Urribarri con los chinos que Bordet deja en pie y es la que legisladores de Cambiemos objetan porque se cierra por contratación directa. Ocurre que el acuerdo con China es por contratación directa o no es. Y lo que ofrece ahora Frigerio a los legisladores de Cambiemos, que en su momento se opusieron al proyecto, es su revisión para certificar que no haya sobreprecios. 

Los chinos dan el crédito blando con una condición: que sea China State Construction Engineering Corporation Ltd. la empresa encargada de la ejecución de la obra de riego. El gobierno nacional no quiere perder el crédito con los chinos porque es barato, a su vez ellos tienen interés en hacer esa obra porque necesitan hacer pie en Argentina. Ya han mostrado su voluntad de competir, por caso, en la licitación internacional para la construcción del puente Paraná-Santa Fe, pero sin antecedentes no calificarían. 

"Necesitan una obra y por eso ofrecen un préstamo blando", interpretan en Cambiemos. Pero lo que en principio se presenta como un financiamiento barato puede terminar saliendo caro para las arcas públicas si se comprueba que, como denuncian los productores, el presupuesto chino estaría inflado en al menos unos 20 millones de dólares, sólo para los trabajos de remoción de tierra, consignó El Diario.

La política 

En clave política, para Cambiemos implicaría un costoso contrasentido terminar avalando una obra sospechada de sobreprecios que se negoció durante el kirchnerismo. omo no pueden modificar la contratación directa, porque esa es la condición que impone el gobierno chino para dar el crédito blando, la Nación ofrece auditar costos. ¿Qué pasa si se detectan sobreprecios? "Se le planteará el problema a los chinos y, si no les gusta, la obra no se hará", respondió un legislador de Cambiemos. 

Frigerio informó del control del gobierno nacional sobre el acuerdo con China en una reunión que mantuvo este viernes, en Paraná, con la dirigencia provincial de Cambiemos. Con su anuncio puso paños fríos a la inquietud que venían expresando legisladores de la coalición, que advertían sobre el doble estándar de repudiar el sistema de obra pública del kirchnerismo y, por otro lado, avalar una contratación directa sospechada de sobreprecio.

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