En 2016 el Gobierno nacional ejecutó 83% del presupuesto anual

En 2016 el Gobierno nacional ejecutó 83% del presupuesto anual

Un informe de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav) reveló que el Gobierno nacional ejecutó poco más del 80% del presupuesto estimado para 2016 y alertó por la subejecución de partidas que se relacionan con aspectos "sociales básicos y derechos adquiridos por la población".

Según el minucioso estudio al que accedió ámbito.com, en el primero de los años de gestión de Cambiemos se ejecutó 83,85% del total previsto, lo que implica unos $ 1,725 billones, contra $ 2,057 billones presupuestados. Además, a 15 días de finalizar el ejercicio, se destaca que casi 30% de los programas cuentan con una ejecución menor al 70%.

La principal hipótesis del trabajo es que Mauricio Macri trasladó de la Ciudad a la Nación una "sistemática subejecución de algunos rubros sensibles en relación a la realidad social". 

Para realizar el análisis área por área, los expertos de la Undav diferenciaron los desembolsos "corrientes", referidos a pagos de salarios, bienes de consumo y gastos de corto plazo, de las "erogaciones de capital", vinculadas a la compra de maquinaria y equipo, inversiones en infraestructura y compras de mayor plazo.

Los ministerios que menos presupuesto ejecutaron son Cultura, Desarrollo Social, Seguridad, Medio Ambiente y Comunicaciones. 

El ministro Pablo Avelluto utilizó 20,9% en gastos de capital. "Trae reminiscencias a las políticas aplicadas en la gestión de la Ciudad, donde el área de Cultura ha sufrido un importante retroceso, con el cierre de diversos programas por falta de inversión en materiales durables e infraestructura", subrayó. 

Los gastos de capital de Carolina Stanley en Desarrollo Social no llegaron al 60%, debido a un menor gasto en "bienes durables" que se utilizan en las prácticas territoriales. "El programa de Mejoramiento Habitacional e Infraestructura Básica hubo una ejecución del 30,5%", señaló la investigación académica.

La ministra de Seguridad Patricia Bulrrich llevó los gastos corrientes al 85,5% por la incorporación de nuevos efectivos a diferentes fuerzas, pero mantiene en 54% los egresos para equipamiento. 

El rabino Sergio Bergman emuló la gestión del medio ambiente de la Ciudad y mantuvo una ejecución similar en gastos corrientes y de capital, superior al 70%, pero inferior al promedio total nacional.

En el Ministerio de Comunicaciones el radical Oscar Aguad utilizó 75% de lo pautado en gastos de capital para cubrir la propia creación de la cartera y del Enacom, que vino a reemplazar al Afsca fue reequipado nuevamente.

Pero la Undav cita otros ejemplos de presupuestos en organismos centrales o descentralizados que muestran el contraste entre los montos contemplados para 2016 y los que realmente fueron aplicados a lo largo del año. Fabricaciones Militares ejecutó 72,8%; el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) 61,7%; el Instituto Nacional del Teatro 60,8%; el Centro Internacional para la Promoción de los DDHH 52,3%; el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas 50,5%, y el Instituto Nacional de Semillas apenas 45,7%.

La observación de la asignación de recursos "por programas" en un ranking de hasta 50% de lo gastado refleja otro aspecto de las prioridades del Gobierno. "Aquellas partidas de índole social, como Pensión Universal para el Adulto Mayor (5%), Planificación de Programas Culturales (13,3%), Sanidad Escolar (13,7%), Coordinación de Proyectos Sociocomunitarios (16,7%), Responsabilidad Social (26,3%) y el programa Recuperar Inclusión (34,8%), entre otras, tienen una ejecución sustancialmente por debajo a lo natural a esta altura del año", expresó el relevamiento elaborado por el Observatorio de Políticas Públicas de la Undav.

El criterio de distribución de fondos "por fuente y finalidad" deja en evidencia que la mayor cantidad de recursos del Tesoro nacional, los propios del gobierno central, los obtenidos por créditos y transferencias internas o externas, se destinan al pago de servicios de deudas y pagos para servicios de defensa y militarización, seguido por servicios económicos y en el resto de los casos servicios sociales.

En el análisis por la "aplicación de los fondos" el rubro Inversión Financiera (88,7%) ocupa el segundo lugar en la ejecución, marcando el orden de prioridades de la actual gestión. En tanto, la Inversión Real Directa (67,2%) se encuentra en el último lugar de la comparación de ejecución, dando cuenta de la "palmaria escasez" de inversiones productivas a lo largo del corriente año. 

Entre los matices de ambos extremos, se encuentran también las Transferencias de Capital (72,6%), que se posicionan muy por debajo de lo ejecutado en concepto de Transferencias Corrientes (88,5%). "Esto implícita un plan de ejecución con metas a corto plazo, en detrimento de un Estado que fomente obras e inversiones de largo plazo", resaltó el reporte universitario.

Si se examina la ejecución "por clasificación económica" se detecta que entre todos los agrupamientos existen algunos que, en promedio, se "encuentran notoriamente por debajo de la ejecución media, y de los estándares esperados faltando escasos días para el final del año". Dos ítems sobresalen del resto y son los relativos al envío de dinero fresco a las provincias y municipios de todo el país.

Las Transferencias en gastos Corrientes a Municipios y Provincias alcanzan al 76,9% de lo pautado y en gastos de Capital un 68,7%. Las primeras son 7% menores al promedio total de ejecución presupuestaria, mientras que las segundas son 15% inferiores. "El hecho de que se ejecuten en defecto aquellas partidas destinadas a jurisdicciones subnacionales, genera una disminución en sus grados de libertad y, por ende, incrementa la dependencia de provincias y municipios de transferencias discrecionales con criterios relativos a los favores de índole política", consideraron en el Observatorio, que coordina Santiago Fraschina, economista fundador de la agrupación La Gran Makro.

Por último, el estudio analizó la ejecución "por partidas" y se encontró que la administración de Cambiemos "expone subejecuciones significativas en algunas partidas sensibles que determinan la imposibilidad de una parte de la población de acceder a derechos esenciales". 

Uno de los casos más paradigmáticos de la menor ejecución es el de Ciencia y Tecnología, donde actualmente los científicos mantienen un conflicto abierto con el Gobierno nacional por el recorte de fondos en 2017, lo que provocaría despidos y suspensión de programas. En 2016 no tuvieron mejor suerte.

VIVIENDA 

Urbanización de Villas y Asentamientos Precarios (33%)

Acciones para la Provisión de Tierras para el Hábitat Social (33,3%)

Acciones para el Mejoramiento Habitacional e Infraestructura Básica (69,5%)

EDUCACIÓN

Programa de apoyo a la infraestructura universitaria (26,3%)

Programa más escuelas, mejor educación (41,5%)

Mejoramiento de la Calidad Educativa (49,5%) Acciones de Formación Docente (49,3%)

Apoyo para el Desarrollo de la Infraestructura Universitaria (26,3%)

Desarrollo de la educación superior (52,2%)

Acciones compensatorias en educación (63,5%)

Infraestructura y equipamiento (72,2%)

CIENCIA Y TECNOLOGÍA 

Fomento al Desarrollo Tecnológico (32,5%)

Investigación Fundamental e Innovaciones Tecnológicas - IFIT (38,9%)

Formulación e Implementación de la Política de Ciencia y Tecnología (40,3%)

Innovación y Desarrollo de la Formación Tecnológica (53,5)

Promoción y Financiamiento de Actividades de Ciencia, Tecnología e Innovación (72,7%)

Formación de Recursos Humanos y Promoción Científica y Tecnológica (73%)

INDUSTRIA

Fomento al Desarrollo Industrial (30,8%)

Promoción de la Productividad y Competitividad PyME (32%)

Análisis y Regulación de la Competencia Comercial Internacional (37,3%)

Financiamiento de Actividades Productivas (44,3%)

Desarrollo y Competitividad Industrial (40%)

EMPLEO

Acciones de Capacitación Laboral (28,3%)

Acciones de Abordaje Integral del Empleo Agrario (32,5%)

Acciones para el Desarrollo de Emprendedores (37%)

Formulación y Regulación de la Política Laboral (37,7%)

Acciones de empleo (40%)

Promoción del Empleo Social, Economía Social y Desarrollo Local (45,6%)

Programa del Ingreso Social con Trabajo (46,7%)

Programa Recuperar Inclusión (51,6%)

Formación y Capacitación (64,1%)

ASISTENCIA SOCIAL

Asistencia y coordinación de Políticas Sociales (38,3%)

Seguridad Alimentaria (42,8%)

Acciones de Promoción y Protección Social (50,1%)

Asistencia Social (55,2%)

Pensiones no contributivas (52,3%)

A modo de conclusión, la Undav aseguró que transcurrido el primer año de gestión de la Alianza Cambiemos, existe una "preponderancia a la ejecución de partidas vinculadas al aspecto financiero de la economía, acorde con el nuevo cambio de modelo", como así también de las partidas que tienen que ver con la "defensa y militarización". 

Asimismo, señalaron que "los flujos temporarios, las partidas cortoplacistas de gastos corrientes, les ganan a las de capital, vinculadas a proyectos de inversión de mediano y largo plazo que sustentan el desarrollo".

Tras aclarar que el presupuesto 2016 fue diseñado por el gobierno anterior, el Observatorio advirtió por una "importante subejecución de partidas y programas que se relacionan con aspectos sociales básicos y derechos adquiridos por la población" y exhortó a continuar este análisis con el desarrollo de los gastos del próximo año, cuando Macri aplique su propia "ley de leyes".

La Universidad consideró que los resultados del informe confirman "la presunción de reproducción de las prácticas de administración pública aplicadas en el Gobierno de la Ciudad, relativas a una subejecución ostensible en varios rubros sensibles desde el punto de vista social". Y remarcó: "La única manera de desentrañar las verdaderas intenciones políticas de una administración gubernamental, es comparar lo prometido con lo verdaderamente realizado, más allá de las circunstancias que permitan dar explicación a las diferencias. De ese modo, la fuerza de un discurso político puede quedar diluida si no hay un contraste con la realidad".

Comentá la nota