13.300 chicos pampeanos participan del Aprender 2016

13.300 chicos pampeanos participan del Aprender 2016

La evaluación se tomará en 333 escuelas primarias y secundarias de la provincia. Los alumnos que no son alcanzados por la prueba no tienen clases este martes. Rechazo de Los gremios docentes.

 

Unos 13.300 chicos pampeanos participarán este martes del operativo de evaluación Aprender 2016. Las pruebas se tomarán en 333 escuelas primarias y secundarias de la provincia. Los chicos que no son alcanzados por la prueba no tienen clase.

Mientras el Gobierno Nacional y el Provincial remarcaron que la evaluación es obligatoria, desde la vereda de enfrente el gremio de UTELPa (alineado con CTERA) se opone al operativo. Otro gremio, el SITEP, también se pronunció en contra de la evaluación.

El operativo Aprender 2016 fue presentado desde La Pampa por la secretaria de Evaluación Educativa del Ministerio de Educación de la Nación, Elena Duro. En todo el país participarán más de 1.400.000 estudiantes en 31.300 escuelas. En La Pampa son 13.300 alumnos de 333 escuelas. Deberán responder una veintena de preguntas, en un tiempo limitado. Según se estima, el tiempo previsto es de dos minutos y medio por pregunta.

Desde enero y en acuerdo con el Consejo Federal de Educación se vienen desarrollando tareas en conjunto con las 24 jurisdicciones, “para poner en valor el dispositivo nacional de evaluación de los aprendizajes, cumpliendo con lo que dice la Ley Nacional 26206. Tenemos la responsabilidad como Estado, nacional y provinciales, de implementar una evaluación nacional de aprendizajes”, explicó Duro esa vez.

El megaoperativo trata de obtener “información sólida y confiable sobre un recorte de la realidad educativa; toda evaluación tiene fortalezas y debilidades. Sirve para tomar decisiones. A nivel nacional la única manera de poder visibilizar ciertas dimensiones de la educación, sobre el aprendizaje y el contexto en las escuelas, es a través de estas herramientas: evaluación estandarizada y un cuestionario de contexto, para fortalecer y enriquecer esa información”, detalló la funcionaria nacional.

El rechazo

El rechazo a las evaluaciones tiene su antecedente durante el gobierno kirchnerista. Las evaluaciones internacionales como PRISA arrojó muy malos resultados para el sistema educativo argentino. El Gobierno Nacional -en manos del kirchnerismo- y los gremios lo rechazaron porque, a pesar de las inversiones, la mejora salarial a los docentes, el mayor presupuesto educativo y las políticas educativas, los resultados eran malos.

Ahora, los gremios como CTERA (alineados con el kirchnerismo) también rechazan el operativo del nuevo gobierno, Aprender 2016.

Critican que se trata de una evaluación estandarizada que solo mide los conocimientos de lengua y matemática. Pero además considera que los resultados se utilizarán para criticar la etapa política anterior.

Además de UTELPa, otro gremio docente de la provincia, el SITEP (Sindicato de Trabajadores de Educación Provincial), se manifestó en contra de la evaluación “Aprender 2016”. “La mayor parte de los docentes no nos sentimos parte de este operativo de evaluación”, expresaron desde el sindicato y sostuvieron que la medición es para “establecer un sistema educativo meritocrático”, subordinado “a los intereses de empresas monopólicas, corporaciones y organismos financieros internacionales”.

El SITEP (ex-Agrupación Fuentealba) rechaza el operativo de evaluación porque “el mismo constituye una condición ‘sine qua non’ para subordinar el sistema educativo a los intereses de empresas monopólicas, corporaciones y organismos financieros internacionales, mediante la implementación de distintas políticas de Estado que hoy son impulsadas por el Gobierno de Macri y en La Pampa, por el gobernador Verna”.

“Las declaraciones públicas de distintos funcionarios del Gobierno Nacional y Provincial, representadas por el ministro Bullrich, y la ministra Garello, expresan las intenciones de establecer un sistema educativo meritocrático, que instrumenta las mediciones estandarizadas realizadas por organismos externos”, sostuvieron.

Por ello, desde el SITEP se oponen “a la implementación de políticas educativas que no sean debatidas de forma democrática por aquellos que formamos parte del sistema; nos negamos a convertirnos en meros reproductores, aplicadores o veedores de las políticas pedagógicas aplicadas desde el poder; rechazamos la evaluación por no reconocer contextos, trayectorias y situaciones de aprendizajes diversas que hacen a la calidad educativa (como se nos solicita hacerlo diariamente en nuestro trabajo desde las instituciones educativas)”.

Aclararon que “la evaluación, en sí, no es el problema, sino qué evaluamos, a quiénes y para qué lo hacemos. Así entendida, la evaluación se torna disciplinadora de la tarea docente, y flexibilizadora de las condiciones laborales y de la calidad educativa, profundizando la fragmentación del sistema educativo, y el insumo necesario para profundizar políticas de ajuste”.

Comentá la nota